Arrugué un diario más encima de la mesa. Habían empezado hacía meses con el siempre socorrido un posible amante celoso y pasado inesperadamente por un ladrón al que los robos se le complicaban, un psicópata escapado del manicomio y, ¡agarraos!: ¡un perfil psicológico inestable en busca de repercusión social! Actualmente se encontraban alternando entre un siempre poético y bien recibido asesino de los ojos perdidos, el no muy descabellado caníbal invisible y el muy adulador aunque completamente improbable un posible imitador. Estaba segura de que nadie podría ser capaz de imitarme.
Suspiré mientras tiraba la arrugada bola de papel a un rincón. A veces me hacían reír, pero en general estaba tan harta de la prensa que bien habría incendiado sus sedes, con redactores y fotógrafos dentro, pero tenía que reconocer que al menos me hacían propaganda y eso podía llegar a darme mucha fama algún día. Por el momento, no llegaba a tanto como para ofrecerme la posibilidad de vivir de ello, pero bien era cierto que mi vida sin ellos habría sido mucho más íntima y aburrida así como carente de artículos de periódico graciosos y ridículos con los que adornar las yermas paredes de mi cuarto de trabajo.
Oscuro, fresco, seco y convenientemente amueblado, lo tenía acondicionado para mis actividades ilícitas. Mis obras cobraban vida en aquel lugar y mientras la carne de sus donantes anónimos se enfriaba en mi nevera, las piezas de madera quedaban ensambladas con sus almas como si hubiesen llegado juntas al mundo. De aquella siniestra habitación salían las más famosas marionetas del país, brillantes como una foto recién revelada, ágiles como un águila adulto en pleno vuelo, vivas y ansiosas de vida a un tiempo, como un cervatillo que acaba de llegar al mundo y que cuando el león le arranca la tráquea todavía no sabe que la vida se le escapará por las costuras hasta que no quede más que una cáscara vacía.
Actualmente estaba trabajando en una de mis mejores obras. Se trataba de un bailarín de ballet llamado Igor, de muslos y caderas anchas, con grandes piernas algo desiguales, ojos azules y pelo cortado por encima de los hombros. Vestía pantalones vaqueros y sujetador de encaje sobre sus protuberantes pechos, bajo una camisa a cuadros desabotonada. Iba descalzo y de puntillas, y llevaba dos aretes en una de las orejas mientras que la otra ni tenía agujero. Fue aquél detalle el que me hizo decidirme por la dueña de aquel orfanato en el que me había criado; ahora ya no más que pedazos incomibles de un cadáver pudriéndose en el pequeño nicho que había cavado para ella a varios kilómetros de distancia antes de llevarme conmigo sus partes aprovechables.
Mientras acunaba el pequeño cofre de plata y detalles de piedras preciosas entre mis manos era consciente de que llevaba dentro el alma perfecta para dar vida a mi última obra maestra.
A cualquier niño huérfano que le pregunten dirá que su mayor anhelo es encontrar unos padres, y es la pura verdad. Por eso me pareció tal justicia poética que la dueña del lugar en el que aquellos niños encontraban tal cosa acabase por convertirse en cierto modo en la madre adoptiva de mi pequeña marioneta. Se llamaba Robin y yo había visto su alma. Era verde y amarilla, con olor a canela y hierba mojada, con trazas de pesadillas negras y amargas que tensaban su mandíbula cuando nadie más miraba. Era el alma perfecta para mi marioneta de un bailarín transexual, amante de las gominolas azucaradas y de los perros patada. Robin, la dueña del orfanato, le daría lo único que le faltaba: vida con la que llenar sus hasta ahora cuencas vacías. El alma de Robin me pertenecía, sin discusión, pues no se puede privar al artista del material con el que hacer sus obras si se pretende que siga aportando su arte al mundo. Y mi arte era Igor, la marioneta-bailarín. Igor, mi marioneta-bailarín con el alma de la dueña de un orfanato.
Así que me puse manos a la obra, depositando sobre la mesa la caja de marfil ennegrecido que guardaba en el bolsillo trasero de mis pantalones y activando con un tirón la cadena que encendía la luz central del cuarto, opaca y rojiza, como en un estudio de revelado de fotos. Solo que yo lo que revelaba no eran fotos; sino almas.
Mientras colocaba adecuadamente los utensilios sobre la mesa, rememoré con un estremecimiento de placer el cuerpo de Robin desangrándose sobre el desagüe de una calle desierta a dos manzanas del durmiente ofranato. Recordé el sonido de sus borbotones angustiados mientras intentaba tomar aire por la boca sin ser consciente de que su tráquea había quedado desgarrada, mientras yo introducía el pequeño anzuelo de madera en el interior de su ojo izquierdo y hacía palanca para hacerlo saltar.
Debo confesaros una cosa: aquello que dicen de que los ojos son el reflejo del alma, es totalmente cierto. El alma de Robin me miraba entonces desde mi mesa de trabajo dentro de la pequeña cajita. Me dispuse a cristalizar sus bellos ojos verdes, aún calientes, resplandecientes en el reflejo cristalino de su última mirada, portadores de su esencia y de los últimos fragmentos de su vida. Mi nueva marioneta sería de nuevo la más codiciada entre los titiriteros famosos de todo el reino. Del continente. Tal vez de La Tierra al completo o —¿por qué no soñar?— incluso de mucho más allá.
Aquella noche me dormí mirando al vacío desde la ventana, tras haber devorado una pequeña parte de los fragmentos del cuerpo de Robin que sí que había traído al congelador de mi nevera. Y soñé con estrellas, y dioses y planetas que tenían vida. Me desperté sudando, angustiada, aplastada contra el colchón, como si mi cuerpo pesase toneladas y el espacio se contrajese a mí alrededor. Respirando con agitación me di cuenta de que en la inmensidad del espacio que se colaba a través de mi ventana, un ojo gigante me observaba… y sonreía. Comprendí entonces que algún ser superior a mí deseaba premiarme por mis obras de arte. Y sonreí de vuelta hacia el cielo mientras, en silencio, volvía a adormilarme.
Me ha encantado leerte, es del tipo de género que me encanta leer y te ha quedado genial, escalofriante. Definitivamente, me gusta tu estilo.
ResponderEliminar¡Hola! Me alegra que te haya gustado el relato. Yo no solía escribir terror pero para este reto establecimos que había que hacer muchos relatos del género, así que me estoy poniendo las pilas y llevo ya cuatro de terror escritos (aún debo dos más para cumplir el objetivo :D)
EliminarMe alegra que te haya gustado mi estilo aunque tengo que confesar que considero este como uno de mis peores relatos :( Lo hice bastante rápido y sin la idea muy clara porque no me quedaba tiempo para más, pero bueno, no siempre puede salir algo que me encante.
Un abrazo! Espero verte más por aquí! :D
Aterrador y espeluznante. Un poco confuso a veces, pero siempre inquietante y con unas descripciones que nos mantienen en vilo. Muy bien llevado. ¡Enhorabuena! Un abrazo.
ResponderEliminarP.D.: echaré un ojo a ese reto.
¡Muy buenas! Creo que este relato no está del todo pulido, por falta de tiempo no quedó tan bien como me gustaría ya que la idea sí que me gustaba bastante pero no tanto el resultado. Me alegra que aún así te haya gustado :D En la cajita verde tienes los enlaces a todos los relatos del reto y también a las normas, por si quieres curiosear. Muchísimas gracias por leer y comentar, me anima mucho :D
EliminarEspero verte más por el blog. Bienvenide!!
Como han comentado anteriormente, la intriga y el toque de terror te mantienen alerta en todo el relato. Quizás cuando cambias de la prensa a la historia propiamente rompe un poco el ritmo y despista, pero enganchas rápido otra vez. Así que nuevamente se tiene que valorar como un gran relato ;-)
ResponderEliminar¡Buenas guapa!
EliminarLa verdad que aunque es un género que me encanta leer, hasta este año con la excusa del reto (que pide escribir seis relatos de terror) no me había puesto en serio a intentarlo y no me veía del todo capaz. Le estoy perdiendo el miedo (nunca mejor dicho) e incluso cogiendo el gustillo.
Creo que en general la historia queda un poco dispersa, pero no me salía muy bien cómo enlazar todas las partes y tenía que publicarlo como estaba por falta de tiempo, así que tuve que conformarme con eso, como digo, no es de mis mejores relatos, o eso creo.
Gracias por comentar y leer.
Buenas tardes
ResponderEliminarBuen relato. Cumple el objetivo de retratar la vida cotidiana de un monstruo bastante repulsivo y malvado.
Lo que más me ha gustado es como lo has relacionado con el relato anterior, porque iba leyendo y leyendo y me preguntaba cómo lo ibas a hacer. Te ha quedado bastante bien.
Un saludo.
Juan.
Muy buenas, Juan.
EliminarMuchas gracias por pasarte siempre a dejar unas palabras. Lo cierto es que creo que la monstruosidad del individuo no me quedó muy bien reflejada, quedaba más asqueroso en mi mente, pero me dio pena no poder dedicarle algo más de tiempo a pulir el relato. Aún así no está mal del todo y ¡¡por fin alguien lo dice!! me encantó la chorrada del final para enalazarlo con el anterior. Como dices, yo también tuve esa sensación, empecé a escribir pensando "mi pajolera idea de como relacionar esto con el anterior objetivo". Porque la idea inicial era que La Tierra contase la historia, pero me di cuenta que entonces no cumpliría los personales y tuve que cambiarla. Así que cuando tuve la idea del final, a pesar de su rareza, me gustó mucho como quedaba.
Muchas gracias. Un abrazo.
Hola Stiby!
ResponderEliminarPues como siempre aquí estoy!
Pues no sé porque dices que no te ha quedado muy tétrico porque a mi me lo ha parecido!.
Por cierto me ha gustado realmente, no tanto como el anterior pero esta muy similar.
Por cierto me ha hecho gracia porque resulta que el libro que leo ahora que se llama el que susurra tiene algo también con temas de títeres y gente que es como movida como títeres XD. ¿ te lo estas leyendo en secreto y no me lo has dicho???
Reina sigue así porque a mi por lo menos me encanta.
Aunque esta vez el enganche entre relatos ha sido con un hilito muy fino ¿no? que por cierto me ha gustado porque es como mira lo toco pero no lo toco....no me explico pero yo me entiendo XD.
Besis.
¡Hola guapa!
EliminarMuchas gracias por pasarte.
La verdad no sé, siento que queda un poco confuso, como partes pegadas sin mucho sentido, pero a veces somos demasiado críticos con nuestras propias cosas, así que yo qué sé. Gracias por animarme.
Pues es curioso lo del libro, de hecho JCTeso por twitter también me pasó un vídeo que conocía sobre títeres, al final va a resultar un tema muy manido jajaja.
La idea sale en realidad de un microrrelato que escribí para LMDEInktober (concretamente el número 30), lleva por tanto casi un año dándome vueltas en la cabeza y apuntada en el bullet, pero mira, hasta ahora tras hablar contigo no me había puesto a desarrollarla.
Muchas gracias por animarme y sí, el enganche es por un lado el canibalismo que practica el protagonista de este relato y el que menciona Cingy el agujero negro en el anterior, y por otro esa sensación al final de este relato de un ojo que está mirando desde el espacio y aprovando sus acciones :D
Un abrazo guapa y gracias por todo.
Nada ya sabes que yo soy una yonki de tus relatos!
EliminarPues te iba a decir que no fueras tan dura contigo misma pero ...le digo la salten al cazo XD.
Al final no tienes ni un poco de originalidad XD y eso que pensé mientras leo el libro del que susurra digo coño nunca lei sobre esto y luego saliste tu XD y fíjate, yo tampoco soy original en mis lecturas XD.
Sigue mucho con esas cositas porque me recuerdan un poco a King y ya sabes lo altito que esta en mi ranking este autor XD.
Besis.
Creo que nos pasa un poco a todos (concretamente te diría que más a las mujeres), esa inseguridad de mostrar lo que escribimos.
EliminarMe halaga que te recuerde a King :) Todavía tengo varios relatos de terror que hacer para el reto, así que puedes estar tranquila, que caerán.
Un beso.
¿En serio?
EliminarDeseando leerlos.
besis.
ay, ese ojo que todo lo ve.
ResponderEliminarY qué mal rollito da el relato, no se yo si llegaré a hacer algún relato de terror ¿lograré dar mal rollito? xD
Pos ma'gustao.
Jajaja el ojo es en plan Sauron, lo sé, lo sé, al menos lo era en mi mente xd.
EliminarMe alegra que dé mal rollito porque no estaba segura, la verdad. Y sobre escribir... pues todo es ponerse. Espero que lo intentes con el terror varias veces, seguro que vas mejorando a cada intento :D ¡Ánimo!
Menudo mal rollo, el ambiente tétrico te ha quedado muy conseguido D:
ResponderEliminarMe alegra que más o menos se entendiese y diese mal rollo a pesar del desliz con los nombres :D Gracias por leer, guapa!
EliminarHola!!
ResponderEliminarMe gusta la sensacion que proyecta este relato. Es sobretodo extraño e inquietante y me ha gistado mucho la forma en que lo has descrito todo, de forma elaborada pero sin llegar a ser pesado. Tambien tengo que reconocer qie me ha parecido un poco raro en algun parrafo, pero que tenga un poco el toque de sin sentido aunmenta la sensacion de extrañaza al leer y creo que logras que el texto encaje cono scono si fuera parte de la demencia del personaje promcipal.
El final de esta frase no lo entendí:
"...amante de las gominolas azucaradas y de los perros patada..."
¿Qué son los perros patada?
Conectaste bien el relato con el anterior, creo que fue suficiente. Y nada más. Enhorabuena por tu pegatina completa ^^
.KATTY.
@Musajue
Hola, preciosa, ya estoy por aquí.
EliminarLa verdad es que este relato es bastante raro, y en general no me gusta, pero lo cierto es que lo hice el último día y no había tiempo para más. De haber tenido una semana lo habría empezado de nuevo.
Como te comenté, creo que el anterior del mes no es un relato a entender palabra por palabra, sino algo abstracto que te deja con una sensación extraña (espero que de calorcito) y que con eso basta. Sobre este... en fin, no sé, no me gusta, así que tampoco puedo decir nada xD
Me alegra que te haya gustado a pesar de su rareza, creo que este mes tuve dos relatos bastante flojillos, al menos son de los que menos orgullosa me siento, pero teniendo en cuenta que no tenía muchas ganas ni inspiración, estoy contenta con al menos haber llegado.
Creo que ya te comenté que los "perros patada" es la forma coloquial de llamar a los perros pequeños. ;D
Me alegra que quedase bien la conexión, también fue rara. Un mes raro en general pero bueno al menos logré los puntos y en agosto remonté, a mi parecer, con relatos mejores. Así que ahora estoy contenta :D
Muchas gracias por comentar, preciosa.
Un beso.